Los principios básicos
de la felicidad
Creo que tener hermanos es algo maravilloso.
No son algo que pueda simplemente existir porque lo queramos. No he tenido hermanos.
El motivo por el que yo, como tu padre, te escribo esto es porque verdaderamente extraño esta sensación y te envidio por tener hermanos.

Durante mi vida en este mundo, he aprendido numerosas lecciones sobre todos los aspectos de las emociones.
A partir de estos conocimientos, creo que los principales aspectos de la vida son la armonía y la paz en la familia.

La historia ha demostrado que mi enfoque es correcto.
Está bien demostrado en las familias de los héroes históricos.

Has compartido indescriptiblemente muchas memorias con tus hermanos; desde que nacieron hasta hoy, habéis comido y dormido juntos bajo el mismo techo.
La historia completa de la familia está impresa y siempre permanente en nuestros recuerdos.
Es lo maravilloso de ser hermanos en una familia.

Con el paso del tiempo, los hermanos crecen y se hacen adultos, alejándose de sus padres y convirtiéndose en miembros de la comunidad.
Aunque esto prueba el crecimiento satisfactorio de los niños, y el disfrute de la familia y los hermanos, la sensación de soledad tras esta pérdida le rompe a uno el corazón.

En el largo viaje de la vida, en el que cada uno presta atención a la construcción de su propio castillo, los hermanos pueden compartir sus ideas y sentimientos.
Cuando hagáis frente a momentos de gran desdicha o sentimientos de dolor, soledad o alegría, no dudéis en compartir tus sentimientos entre vosotros.